CONSEJOS PARA TRATAR CON PERSONAS DIFÍCILES
¿Quién no ha tenido que lidiar alguna vez con alguna persona difícil? Cuando hablamos de este tipo de personas no siempre puedes elegir alejarte de esas personas, bien porque se trate de un compañero de trabajo, un familiar, hijo/a adolescente, o un amigo.
Piensa que ninguna persona por difícil que sea, es una causa perdida. Con excepción de las personas que tienen una enfermedad mental o son psicópatas, tratar a personas que están pasando un mal momento, es cuestión de tener buena voluntad para lograrlo y seguir algunos consejos que te mostramos a continuación:
Demuestra empatía
Demuestra empatía
Si la persona conflictiva trata a todas las personas con el mismo tono impaciente no hay razón para que te sientas ofendido. En lugar de ponerte a la defensiva o sentirte lastimado, trata de hacer caso omiso a sus comentarios negativos. Tu mejor arma es responder con autoestima con tolerancia y compasión. Su espíritu seguramente está lleno de dolor e inseguridad, por ello trata de ver la situación desde la perspectiva de esa persona a pesar de que sea difícil.
Re-dirige la conversación y utiliza el humor.
Cuando aparezcan esos temas conflictivos, nada mejor que aprender a re-dirigir la conversación hacia tópicos más amables. Es mucho más eficaz utilizar el sentido del humor. En algunas ocasiones las personas no son conscientes de cuánto afecta su estado anímico en las demás personas.
Autoafírmate
Tratar con una persona difícil no supone callarse las necesidades y emociones propias anteponiendo las ajenas, es importante el respeto pero actuar con asertividad, o lo que es lo mismo, expresar con claridad tus necesidades gustos y opiniones, con el fin de que la otra persona sea consciente de que no es la única que debe ser escuchada.
Mantén la calma
La tendencia de las personas difíciles de ver lo negativo del mundo y proyectar en los otros, puede nacer de conflictos no resueltos o defectos no superados. Nadie se vuelve amargado por gusto. Este tipo de personas pueden usar estrategias inconscientes para robarte la serenidad porque no soportan que los demás estén bien. Prepárate a conservar la calma, sobre todo si aprecias a esas personas.
Pregúntate por qué esa persona te saca de tu equilibrio. Por muy sorprendente que te parezca esa persona podría ser tu maestr@
1. Practica la meditación, es una de las decisiones mas favorecedoras para estar en tu centro.
2. Trata de practicar el proverbio «piensa antes de hablar». Tómate unos veinte segundos y haz respiraciones profundas antes de responder sin pensar. Este tiempo te ayudará a evitar una respuesta de la cual te podrías arrepentir después. Si la persona en cuestión no está dispuesta a escucharte y sólo muestra su tendencia agresora, no lo permitas!!!, quizás es necesario en ese momento dejar la conversación para otro momento, porque si sigues insistiendo te pondrás a su altura y ya será tarde.
Si fuera una persona querida tu reto es aportarle paz en lugar de que ella te despoje de la tuya. Prueba que estás en un nivel más evolucionado simplemente pensando que quien está de mal humor no es la persona que aprecias, sino el enfado que la tiene atrapada. En lugar de predisponerte al ataque trata de hacer todo lo contrario; la cordialidad sincera es capaz de romper más barreras de las que te puedas imaginar.
Si los problemas persisten, la psicoterapia de forma telemática o presencial, podrían también ayudarte a reforzar el autocontrol en las relaciones y esclarecer esquemas inconscientes del pasado.
Eulalia Cardona
Psicóloga Clínica
Móvil: 618715278
eucardona61@gmail.com
Me gusta, y son muy acertados la forma de enfocar la convivencia con una persona difícil y no dejar que su mal humor y agresividad te la transmita, pero debe de haber un convencimiento de no ceder en devolver la violencia porque nos perjudica y nos complica. La compasión es una buena arma para esas situaciones.