Eulalia Cardona
Hace unos años, tuve la necesidad de volver a revisar mi vida. Me aventuré entonces a seguir explorando con los estados modificados de conciencia, y entre distintas opciones, me decidí por un taller de Respiración Holotrópica
Al comienzo, me encontré con un numeroso grupo de personas que estaban, al igual que yo, dispuestos a conocer un método que nos adentraría, según nos explicaron, en una poderosa experiencia transformadora. Una experiencia de naturaleza transcendental. Observé que el enfoque del método, coincidía con el de Carl Gustav Jung y con las bases de la Hipnosis clínica que yo utilizaba. La Respiración Holotrópica también puede facilitar la autocuración del paciente, a adquirir conciencia, y a reintegrar aquellos elementos fragmentados del complejo cuerpo-mente.
Recuerdo que durante la preparación psicológica precedente, se nos incitó a suspender toda actividad analítica y aceptar cualquier experiencia que emergiera. Debíamos conducirnos con plena confianza y sin prejuicios. Una disposición semejante a la que se logra con ciertos métodos de meditaciones budistas, y también con los estados hipnóticos, limitándonos a observar las experiencias emergentes y registrarlas sin tratar de retenerlas.
Después de esta experiencia, comprendí que la Respiración Holotrópica, al igual que la Hipnosis, sería un método complementario a mi experiencia como psicóloga; una vía de enriquecimiento intenso que no sólo me sirvió para ayudarme a mí misma, sino también para ayudar a los demás.
La Respiración Holotrópica es un método natural. Combina respiración, música evocativa, trabajo corporal focalizado, arte e integración grupal. Está basada, al igual que la hipnosis clínica, en el poder transformador de los estados modificados de conciencia y en el acceso a las capas más profundas de la psique. Una expansión de conciencia que conlleva a la apertura en numerosos casos de procesos transpersonales. Una experiencia terapéutica eficaz que, necesariamente, debe ejercerse por profesionales cualificados.
Cualquier practicante de técnicas orientales, sufíes, pranayama, las psicocorporales de Wilhem Reich, o de los métodos de Gurdjieff, conoce muy bien el alcance de esos estados que abre la puerta al inconsciente, pero muchas personas se pueden quedar con la sensación de no saber qué hacer con todo ese contenido.
Por ello, lo que pude experimentar en todos esos años, es que después de las sesiones grupales de respiración algunas personas necesitan una ayuda psicológica extra. Puede que determinadas vivencias no hayan quedado resueltas o, simplemente, hay que seguir aclarando, en sesiones individuales algún contenido importante que haya surgido en dicho proceso.
La Hipnosis clínica, junto con la terapia cognitivo-conductual, es una opción de psicoterapia eficaz. En el estado hipnótico también se utilizan los recursos naturales de la propia persona y se ponen en marcha una gran cantidad de neurotransmisores para ayudar a “desatascar” e “integrar” aquellos temas que pudieran haber quedado pendientes en la experiencia Holotrópica.
En suma, la Respiración Holotrópica y la hipnosis son métodos altamente recomendables y complementarios para personas que deseen explorar espacios interiores del ser. Llegar directamente al inconsciente, en menos tiempo que otras terapias en las que se necesitan años para llegar a lo mismo.
Eulalia Cardona
Psicóloga clínica especialista en Hipnosis por la Universidad Complutense de Madrid.
Facilitadora en Respiración Holotrópica (Certificada por Grof Transpersonal Training)
www.centrokardia.com
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